El efecto mariposa trata sobre la impredecibilidad de los sistemas caóticos, como la meteorología. Y precisamente la relación del clima con un lepidóptero como la procesionaria han llevado al investigador del CREAF y el CTFC Lluís Brotons a despegar su dron sobre los bosques del Solsonès afectados por esta plaga. Lo hemos podido ver en el último QuèQuiCom.
La procesionaria es un insecto más conocido por su fase larvaria que por su estadio de mariposa. No deja de ser curioso que este lepidóptero esté relacionado con el famoso ‘efecto mariposa’. En el QuèQuiCom del pasado 4 de mayo trataron la complejidad de los sistemas caóticos, los cuales son muy sensibles a pequeñísimas variaciones iniciales de sus variables. Uno de los fenómenos más difíciles de predecir es el tiempo meteorológico, que en nuestro país depende en gran parte de un fenómeno atmosférico llamado Oscilación del Atlántico Norte (NAO, por sus siglas en inglés).
La influencia que ha tenido la meteorología, muy benigna este invierno, ha sido clave para permitir la plaga de procesionaria en los bosques de pinos en algunas zonas de Cataluña, y que Lluís Brotons ha grabado con su dron. El efecto mariposa une así dos fenómenos aparentemente muy distantes tanto por distancia como por su propia naturaleza.
