En el CREAF nos mueve la ecología, pero también el arte. Por eso, hemos participado en una jornada organizada por los artistas Agustí Ortiz y Carola Moujan, residentes en nuestra estación de Can Balasc en colaboración con el CREAF y la fábrica de creación La Escocesa. La jornada nos ha permitido reflexionar sobre el significado y significante del bosque y sus elementos en el ámbito social, histórico, simbólico y biológico.

Empezamos el día en la estación de ferrocarriles de la Floresta, rodeados del verde de los árboles y el gris de la niebla matinal. El grupo que conforma la salida es diverso: biólogas, físicos, artistas y, como maestros de ceremonias, Carola y Agustí. Una vez realizadas las presentaciones de rigor iniciamos la ruta hasta Can Balasc, la estación biológica del Parque de Collserola. Cruzamos urbanizaciones y autovías y nos adentramos en el bosque, donde el ruido de los coches se amortigua, aunque siempre nos acompaña. Agustí nos invita a reflexionar sobre estas conexiones aparentemente antagónicas: cómo el sonido de los coches forma parte del bosque al igual que el sonido de los pájaros, cómo las plantas endémicas comparten espacio con otras foráneas, y cómo los caminos pisados ​​por los humanos se creen con aquellos marcados por el jabalí o la musaraña. Carola y Agustí nos muestran parte del fruto de su estancia artística en el CREAF. En medio del bosque se levantan unos rectángulos de madera negros que enmarcan una balsa artificial o una estación de estudio de tejones engullida por la hiedra y el musgo. Estos marcos pretenden ser deconstrucciones de los tradicionales dioramas de herencia europea y colonial que se utilizaban en los Museos de Naturaleza.

Una vez terminada la excursión nos dirigimos a Can Balasc, donde Carola nos tiene preparadas un par más de sorpresas. El grupo diverso nos congregamos y observamos a nuestro alrededor desde la caseta de ladrillos adyacente a la masía, agradecidos por la sombra y la frescura que nos aporta. Nos rodean varios elementos que han formado parte de este proceso de investigación artística: una mesa alargada llena de flores, semillas, hojas y ramas debidamente etiquetadas, semilleros con brotes incipientes, un mapa de Collserola y una mesa con tarjetas que contienen dibujos de especies con sus nombres científicos y comunes indicados.

Carola nos invita a hacer grupos de tres con las tarjetas de estas especies y pegarlas en la pared. ¿El criterio? El que nosotros decidimos. La pared previamente desnuda se va llenando de tarjetas y, cuando ya no quedan más, pegamos post-its o dibujos de plantas con su nombre común o científico. Las taxonomías que se generan reflejan la diversidad del grupo de participantes; así, mientras algunas personas utilizan criterios como su distribución geográfica o altitudinal, otras agrupan a las especies por la implicación social, histórica o folclórica de su nombre común o, incluso, por criterios personales, tales como un recuerdo de niñez . El mural collage que se ha construido colectivamente contradice la percepción de las taxonomías como algo rígido e inamovible y nos hace pensar en un concepto más flexible, inevitablemente ligado al trasfondo subjetivo de cada uno.

A continuación Carola dirige nuestra atención a una pizarra magnética blanca: contiene un diagrama que descompone la idea de bosque en diferentes elementos, culturales, geográficos, sensoriales, taxonómicos, relacionales, folclóricos… El esquema es bastante completo, pero Carola nos anima a modificar el diagrama, añadiendo, eliminando o relacionando otros conceptos. La pizarra va abarrotándose de nuevas ideas, de caminos que interseccionan y unen elementos y forman una telaraña de complejidades. Como en la anterior actividad, cada uno aporta su granito de arena y esto hace que ampliamos nuestra idea inicial de lo que es un bosque, reflexiones y preguntas que forman parte del trabajo de investigación y experimentación de Carola y Agustí , Future Forest Diorama.

Future Forest Diorama y la nueva residencia artística

El proyecto Future Forest Diorama es una instalación artística que se opone a las representaciones nostálgicas de la naturaleza ya la ilusión del bosque como un mundo ideal, virgen de todo contacto con el poder destructor de la humanidad. La investigación que ha servido como preámbulo al desarrollo de la instalación, se ha realizado en colaboración con el CREAF y ha buscado entender cómo se organizan las redes de soporte mutuo de la comunidad vegetal, trasponiendo conceptos como la comunicación , la cooperación y la interacción con el medio en el que se desarrollan las plantas. Este proyecto se realiza bajo el paraguas de Ecotons, la residencia artística que une al CREAF con la fábrica de creación La Escocesa, con la intención de acercar la ciencia de la ecología al arte y viceversa.

Después de las actividades de creación colectiva y de una comida en la que las preguntas mutuas no se detienen, continúa el debate en la última actividad: la mesa redonda. Unas fotografías del charco artificial de Can Balasc y de los marcos que habíamos visto en la excursión de la mañana sirven como pistoletazo de salida de la dinámica. El objetivo del diálogo es reflexionar sobre los conceptos de paisaje natural y paisaje artificial mediante una lluvia de ideas en torno a las fotografías que llena la tabla de post-its amarillos. Se profundiza en el concepto de diorama y, todo ello, consolida las reflexiones que hemos hecho durante las anteriores actividades que permiten introducir nuevos puntos de vista, como la influencia de la cultura popular y cinematográfica en el imaginario colectivo y, por tanto, en las percepciones y definiciones de la naturaleza.

Volviendo a la estación de la Floresta la niebla ha esparcido y el sol es resplandeciente. Los aprendizajes recibidos nos hacen mirar el bosque que se extiende ante nosotros de otra manera. Y es que, ¿realmente, qué es un bosque?

Testimonis

Artistas y científicas tenemos universos diferentes, pero la colaboración se dio de manera muy natural y espontánea y ha dado fruto a nuevas ideas y nuevos proyectos y seguramente continuará más allá de esta residencia concreta. CAROLA MOUJAN, artista residente en el CREAF.

El proyecto de Future Forest Diorama nos lleva a repensar nuestra visión humana sobre la naturaleza mediante el estudio de una comunidad biológica, concretamente en Collserola, y el aprendizaje de metodologías científicas. AGUSTÍN ORTIZ, artista residente en el CREAF.

Sentí que podía liberar mis sentimientos y emociones hablando de temas que siempre había tratado de forma mucho más racional. De repente podía expresar lo que me sugería la idea del bosque sin el filtro de tener que ser científicamente correcto. LUCÍA GALIANO, Coordinadora de infraestructuras en el CREAF.

Me gusta que las artistas residentes puedan trabajar junto a las científicas, de modo que ambas partes se puedan beneficiar de las investigaciones realizadas en cada ámbito. Durante las actividades encontré que las científicas tenían interés real en las investigaciones de las artistas y viceversa. GEMMA PARÍS, profesora de Didáctica

Durante la realización del mapa conceptual, las científicas comentaron que el mapa era muy completo porque contemplaba muchos aspectos relacionados con el bosque y se preguntaban por qué desde la ciencia no se contemplaban estos aspectos más emocionales y culturales. ROSA LLOP, codirectora del Máster en Diseño y Dirección de Experiencia de Usuario y Servicios Digitales.